A estas alturas todos tenemos claro que incluir verduras y frutas en la dieta es fundamental para llevar una alimentación equilibrada. La mayor parte de estos alimentos aportan vitaminas, minerales, y agua, necesarios para el correcto mantenimiento de nuestro cuerpo. Sin embargo, son muchas las personas que no tienen claro cómo deben lavar frutas y verduras para su correcta ingesta.
Por eso, a lo largo de este post nos encargaremos de explicar cómo tratar, preparar y lavar fruta y verdura antes de comerla.
Las manos pueden tener gérmenes que se traspasan a las frutas y verduras que vayamos a manipular. Por eso, es importante lavarse las manos siempre después de ir al baño y antes de manipular cualquier tipo de alimento.
Es importante lavar todas las piezas de fruta incluidas las que luego vayamos a pelar. La piel de las frutas pueden contener restos de herbicidas, gérmenes o suciedad que se pegará a nuestras manos y posteriormente ingeriremos al comer las piezas de fruta.
Es recomendable secar la fruta después de lavarla para eliminar completamente los restos de gérmenes y suciedad que pudiesen quedar adheridos en su superficie.
La verdura y la fruta puede dañarse con mucha facilidad durante su recogida y transporte. Desde La Nación Digital insistimos en la necesidad de retirar esas partes para evitar que nos llevemos a la boca un trozo de alimento en mal estado.
Las verduras que vayamos a tomar crudos en ensalada o en cualquier otro plato deberían estar previamente unos minutos sumergidos en agua. Para eliminar cualquier insecto o herbicida.
Para hacer una macedonia o presentar las frutas en la mesa, hay que cortarlas en una tabla diferente de la que se utiliza para la carne o el pollo. No usar el mismo cuchillo para las frutas o las ensaladas que para otros alimentos.
La carne cruda puede contener virus y bacterias que se eliminan durante su elaboración en la sartén o el horno, pero muchas verduras se sirven totalmente crudas y las bacterias de la carne podrían sobrevivir en su superficie. Para evitarlo, utiliza siempre cuchillos diferentes.
En las verduras y frutas envasadas en latas o tarros de cristal, como el melocotón o la piña, es importante limpiar la tapa del recipiente, comprobar que está bien cerrado y no dañado, su fecha de caducidad (el momento hasta el cual el alimento puede consumirse de forma segura) o la fecha de consumo preferente (el momento hasta el cual conserva su calidad y propiedades organolépticas).
El último consejos sobre cómo aprender a lavar frutas y verduras tiene que ver con la temperatura. Hay que refrigerar cuanto antes las frutas y verduras cortadas, peladas o precocinadas y siempre separadas del resto de alimentos tanto cocinados o crudos. Además, debemos guardarlas en la nevera en las zonas menos frías para evitar que se estropeen a causa del frío excesivo.
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