El portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados Gabriel Rufián intervino ayer por la tarde con motivo de la moción de censura que propuso Vox con el objetivo de derribar el Gobierno del Frente Popular. El dirigente separatista, como era previsible, anunció que su formación votaría 'no' y contribuiría de esta forma a mantener en el cargo a Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Si facilitó la anterior moción de censura al Partido Popular de Mariano Rajoy es lógico que también impida ésta.
Rufián pronunció un discurso con el tono al que ya nos tiene acostumbrados y sólo le faltó sacar la impresora. El separatista volvió a repetir el contenido del tweet que horas antes había publicado sobre Vox, Trump y Blas Piñar y describió a Vox como un partido "fascista, racista, xenófobo y machista" además de muchas otros insultos y falsas acusaciones que faltan el respeto a los casi cuatro millones de votantes.
El catalán charnego continuó tirando de manual progre y repitiendo el discurso habitual. Recordó que "no es más patriota quién saca la bandera a su balcón, sino quien paga impuestos en España", lo que puso en bandeja a Santiago Abascal un tremendo zasca dirigido al portavoz de Podemos, Pablo Echenique, que ha sido recientemente sancionado por defraudar dinero a la Seguridad Social y a Hacienda al pagar en negro a un cuidador personal y no ingresar sus cotizaciones ni tampoco pagar impuestos por ello.
Abascal a Rufián: "Dice Vd. que "patriotismo es pagar los impuestos". No esperaba ese ataque a Echenique".
— Fco. J. Contreras (@fjconpe) October 21, 2020