El pasado fin de semana, con motivo del nuevo decreto de estado de alarma y de las nuevas restricciones impuestas por el Gobierno del Frente Popular con el objetivo de restringir nuestros derechos y libertades, se produjeron altercados en las calles y plazas de las principales ciudades de España. Unos altercados que fueron protagonizados por movimientos radicales de izquierda que, pese a ser sus votantes, se oponen a las medidas.
Los dirigentes de Podemos, con la ayuda habitual de los medios progres, transmitieron el mensaje de que los responsables habían sido miembros de la "extrema derecha", una acusación que fue fácilmente y rápidamente desmontada. Ahora hemos sabido que la Policía de Santander detuvo a ocho personas y uno de ellos, es musulmán llamaba a la revolución en nombre de Alá.
Los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ya habían localizado hace unos días en las redes sociales un vídeo en el que se veía a este individuo con la cara tapada y portando un machete y una catana. En su discurso, llamaba a la movilización en Santander, haciendo referencia a la "esclavitud de los negros" como ejemplos de poder de occidente y cerraba su intervención con un "revolución o muerte".