Los progres y los movimientos de izquierdas consideran que sus valores son superiores y mejores que los de los demás. Se llenan la boca con su supuesta solidaridad con los más necesitados pero a la mínima que hay que arrimar el hombro se escaquean y se evidencian las incoherencias. En los últimos días hemos podido saber como liberados sindicales del sector de la sanidad han renunciado a colaborar y prefieren cobrar su paguita sin hacer nada. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, sólo 1 de cada 3 ha aceptado prestar sus servicios para acabar con la crisis sanitaria.
Los liberados sindicales de Castilla La Mancha tampoco han mejorado la reputación de sus colegas madrileños. Con los bares cerrados, prefieren ver la crisis del coronavirus desde el sofá de su casa, con una cerveza de supermercado en la mano. Se ha hecho eco de ello del diputado de Ciudadanos en las Cortes Valencianas, Toni Cantó.
Liberados sindicales de la sanidad manchega se niegan a trabajar en plena emergencia sanitaria
— Toni Cantó (@Tonicanto1) March 30, 2020
“No encontramos adecuada ni justificada esa petición"
Casi 6.000 contagiados y más de 600 muertos en Castilla-La Mancha no les debe parecer suficiente https://t.co/t7viLlqz8X
El periodista de La Razón, Alfonso Ussía, ha publicado un tweet que supone un zasca impresionante a estos sanitarios que, aprovechando su condición de liberados sindicales, se niegan a trabajar y quieren seguir siendo beneficiarios de su paguita.
Vagos y malos.
— Alfonso Ussía (@alfonso_ussia) March 30, 2020